Estoy muy contenta y agradecida, porque la Fran y el Pato me escogieron para hacer esta sesión, que sin lugar a dudas, estaría recargada de amor. Cotidianos y naturales, documenté un poquito de sus vidas, un mes antes de que llegue el Likan a la familia. La Abril era la más feliz por las fotos y lo demostraba rebalsando su energía gimnástica. Curioso, porque rápidamente se olvidaba de la cámara y disfrutaba al máximo, sin malgastar un instante. Compartir este momento de conexión con ellos fue muy enriquecedor.
Terminamos la jornada comiendo una exquisita lasaña que hicieron los chiquillos, ñam ñam ñami (guatita llena, corazón contento).
Espero que cuando pasen los años y vuelvan a ver estas fotos (con el Likan), puedan alegrar sus memorias.
Feliz, los invito a ver esta sesión, que está hecha con mucho mucho cariño, un día de sol de mayo <3
(y como para sostener el relajo -Kevin Johansen – Oh My Love My love- sonando de fondo).
Romina, que hermosas. me dieron puros escalofríos <3
felicitaciones eres muy seca
Muchas gracias Cindy!!! <3
me llené de amor de puro verlas, eres una capa
Gracias Sofiiiii!